Entrevista con Laia Vargas - Atención Primaria Vallcarca-Sant Gervasi

¿Cómo hemos vivido la irrupción de la Covid-19 en el CAP? II

La irrupción de la Covid-19 cambió nuestras vidas y la forma en la que trabajamos. Para conocer mejor la experiencia de los compañeros del centro de atención primaria y como reconocimiento a su esfuerzo, hemos entrevistado a una persona de cada estamento.

Esta es la entrevista con la trabajadora social Laia Vargas. Esta conversación tuvo lugar a mediados de julio del 2020.

 

¿Cómo cambió la irrupción de la Covid-19 la manera de ejercer tu profesión?

Laia Vargas: Cambió completamente la forma de trabajar, porque no podíamos atender a los pacientes presencialmente. Y es más complicado crear el vínculo profesional con los pacientes por teléfono, porque se puedan abrir y explicar cuál es su problema.

El hecho que hubiera continuamente nueva información, nuevos protocolos… fue un poco caótico. Las trabajadoras sociales de todas las EBA [centros de atención primaria que son entidades de base asociativa] nos tuvimos que coordinar para poder organizar toda la información, porque no te habías aprendido un protocolo, que ya salía otro.

La gente recibía también información muy sesgada. Quizás te reclamaban una ayuda que era de otra comunidad autónoma, pero a la tele lo habían explicado como estatal. Salían muchas ayudas, pero tenían unos requisitos muy concretos, por lo tanto había muchas personas que quedaban excluidas. Y la gente no lo entendía.

Te tocó lidiar con la frustración de la gente y además por teléfono.

LV: Exacto. Y entonces, quizás había gente que confinada, a la que no le correspondían ayudas de comer a domicilio. Si la familia no lo hacía por miedo al contagio, había ahí una carencia que nos tocó a nosotros suplir con las asociaciones de vecinos,  que se implicaron muchísimo, o como pudimos nosotros.

El papel de la comunidad ha sido importante.

LV: Sí, mucho. Nos ayudó tanto a detectar vecinos que se encontraban mal, pero que no avisaban en el CAP por miedo a lo que podía pasar; como creando redes vecinales, sobre todo en Vallcarca, que se ofrecían a hacer la compra o a ir a la farmacia para la gente mayor que estaba aislada.

¿Qué fue lo más difícil para ti durante aquel periodo?

LV: Gestionar la urgencia. Todo era urgente. Los profesionales no tenían las herramientas suficientes. Y las propias personas, que se encontraban en una situación estresante o de miedo, tampoco estaban para sentir “un momento que lo tengo que consultar”, o “esta ayuda, aunque la tramite ahora mismo, no te llegará hasta de aquí un par de días”.

La gente estaba muy apurada y no entendía que era una situación nueva para todo el mundo, que todos teníamos que aprender y todos íbamos al mismo ritmo. Era como si tuviera que tener todas las respuestas de forma inmediata. Y la tele con los mensajes que daba no ayudaba.

Algunas prestaciones de los servicios sociales municipales quedaron en pausa y no poder contar con estos servicios se nos complicó mucho todo. Nos encontrábamos con problemas sociales que se convertían en médicos.

¿Cómo has vivido estos meses, qué te ha ayudado más?

LV: Tener mucha coordinación con el equipo de medicina de familia del CAP. Podernos consultar cosas en cualquier momento, en cualquier hora. Y también con otras trabajadoras sociales otros CAP, por en cualquier situación que no sabías como gestionar, consultarlas y entre todas ayudarnos. Y la trabajadora social del consorcio de Barcelona también nos ayudó muchísimo.

¿Y durante el desconfinamiento y la nueva normalidad?

LV: Volver a retomar el día a día. Parecía que la gente pensaba que una vez finalizado el estado de alarma era vía libre y no es así.

En el trabajo no podemos citar a las personas como querríamos. En trabajo social es difícil hacer la tría telefónica, la visitas son muy largas y te expones mucho rato con el paciente. Hay pacientes con los que no te puedes entender por vía telefónica o necesitas ver la realidad en el domicilio. Antes hacía un domicilio en la semana, ahora hago dos o tres. Han aumentado las necesidades.

¿Qué te habría ayudado y has echado de menos?

LV: La conciencia social de que todos lo estamos sufriendo a nivel personal y profesional. Que te trataran con más respeto, siente más conscientes de que tú hacías lo que podías.

En cuanto a los medios de comunicación, una información más cuidadosa y menos alarmista, nos hubiera ayudado bastante.

¿Qué querrías explicar en la población de cara en otoño?

LV: Por favor, sed responsables y tened autocuidado, por no caer enfermos, pero también tened una conciencia social hacia los demás y entended que los profesionales seguimos trabajando y que durante el pico trabajábamos hasta 24h, leyendo protocolos, ayudas etc. Por mucho que desde la Unidad de Atención al Usuario os digan que llamaremos hoy, si les llamamos mañana es porque no es urgente o no hemos podido. Es que no podemos más. No nos olvidamos de nadie, pero llegamos hasta donde podemos.